Sugerencia musical: "Esperando mi tren" de Revolver
http://www.youtube.com/watch?v=D1-6j5wKF8U
En una estación cualquiera, de una ciudad cualquiera. Ahí
estaba yo, al igual que un pájaro otea el horizonte, esperaba yo un tren que no
llegaba, un tren que me ayudara a alejarme de ese lugar. Quería que estuviese
ya allí, para poder abandonar la ciudad que me asfixiaba, que me había
convertido en un fantasma de lo que fui, un espectro de lo que soñaba ser algún
día, una sombra que se desvanecía en la oscuridad de la noche.
Las últimas semanas, la tristeza se había apoderado de mi corazón,
como un halcón con sus garras se aferran a su presa, había hincado sus largas lanzas de dolor y atravesándolo
sin piedad hasta hacerlo estallar en mil
pedazos. Las ilusiones y sueños habían
huido con una gran estampida, como una
tormenta de arena que lo abrasa y yerma
todo al pasar, tal y como solo lo puede hacer la mentira, el engaño y el desamor.
Era una huida, un viaje a otro destino, a otra vida, a otra
ciudad. Cogí aquel tren con el que abandone aquella calle cualquiera, de un barrio de una ciudad
cualquiera, que me llevo a otra ciudad distinta, con un barrio nuevo, una calle
diferente, pero algo no había cambiado, mi magullado corazón. No se puedes huir
de lo que llevas contigo, no puedes abandonar lo que no quieres perder, no
puedes creer que por emprender un largo viaje, por ser un viajero a ninguna
parte, el miedo a olvidar te va a dejar
escapar.
El viaje de la vida no consiste en recorrer muchos caminos,
sino en descubrirte el equipaje que llevas, el peso con el que cargas tu
interior, y así como el viento que se lleva las nubes de tormenta, el viento de
la esperanza se llevaran las nubes que te ahogan y no te dejan avanzar.
Cuando por fin mi corazón volvió a llenarse de llamas de
ilusión renovada y el amor nuevamente
habitó en él, pude viajar, esta vez ligero de equipaje pero lleno de aire de
esperanza, a una calle de una ciudad cualquiera y gritar: ¡estoy aquí y soy feliz!