REFLEXIONES

1º Reflexión:“Levantarse cada día con una ilusión apartará la tristeza de tu corazón”

Hoy quiero empezar a escribir esta serie de cartas, epístolas para quien las quiera leer. Algunas serán reflexiones, otras quizás serán pequeñas historias, otros tal vez pequeños sueños que se convirtieron en ilusiones y que un día se fueron como la bruma en un día con sol. No quiero ni deseo nada con esto, sólo que quién lo lea piense, reflexione, llore o sonríe pero siempre con una brizna de esperanza, y pensando que: “Levantarse cada día con una ilusión apartará la tristeza de tu corazón”

Primera

“La vida en soledad es una noche sin luna, un paseo sin árboles, un atardecer sin paz”

(Sugiero oír, escuchar esa magnífica canción que es “Ma solitude” de Georges Moustaki)

Hoy me levante como otro sábado más, mire mis paredes color violeta claro, mire mi techo del que sigue colgando esa única bombilla, con su brillo blanquecino pero a la vez solitaria. Solo estoy, miro por la ventana y veo la vida pasar, se me escapa entre mis lágrimas que se derraman sin parar, y no puedo impedir recordar cómo he llegado a estar en esta oscura noche, en esta vereda sin árboles que me protejan, en este atardecer de mi vida en el que no encuentro la paz. Tal vez hubo un instante donde sin querer abrace a esa compañera que es la soledad, esa que te arropa como lo hace la noche con el día, esa compañera celosa que no te deja ni respirar pero que necesitas para no asfixiarte y desfallecer, en esa oscuridad en la que la noche se ha hecho dueña de una vida en la que hubo luz y ahora solamente en penumbra esta.

Pero hoy me he levantado y he sonreído, no sé porque, quizás me ría de mi lúgubre destino, o tal vez mi sonrisa sea la esperanza de que ha nacido un nuevo día, y me ha venido a mi mente esta reflexión: “Levantarse cada día con una ilusión apartará la tristeza de tu corazón”. He vuelto a derramar lágrimas, pero esta vez no por la soledad, sino por el amor a la vida que hay que vivir y disfrutar, con sus luces y penumbras si, con amarguras y alegrias si, con sinsabores pero tambien llena de brillantes colores si, pero siempre llena de ilusiones, sueños y amores por cada una de las maravillosas cosas por las que se tiene que disfrutar. Ahora veo en mis recuerdos esa sonrisa en los ojos de mis amigos, esas fantasías buscadas y no encontradas, pero que le han dado luz a mi vida, por eso vuelvo y me levanto frente a esa falsa amiga que era mi soledad, la abandono definitivamente sin volver a mirarla, y afronto porque puedo, quiero y me lo merezco esta magnifica vida que he vivido, vivo y vivire.

Por tanto me voy a comprar una lámpara

2 Reflexión: “Si has vivido un desengaño, no lo has perdido sino te ha perdido”

II

Una tarde una chica me conto esta reflexión que aquí os dejo casi al pie de la letra .

(Recomendación: escuchar la cancion de el Barrio "El nunca jamás"

“El paso del tiempo marca los rostros como los días sin verte marcan mi corazón”

Ha pasado el tiempo y todavía te recuerdo, todavía mi corazón marcado esta por ese amor que yo te di y que tú me negaste devolver. Yo sufría cuando te veía por los pasillos del instituto pasar, cuando con otras te veía reír, tal vez lo hicieras sin querer pero mi vida hiciste naufragar.  
Que la tempestad de un desamor no haga naufragar el barco de tu esperanza, esa fue la enseñanza que sin querer me diste, y ahora que te veo por los rincones llorar por aquella por la tu amor diste y no te quiso dar, ahora yo te digo lo que a mí un día me dijeron:
“Si has vivido un desengaño, no lo has perdido sino te ha perdido”, hazlo, yo lo he hecho, tú te lo perdiste y yo encontré quien me buscaba y me quería ver. Ahora ya no te necesito, por ti no lloro por las noches, ni sueño por el día.
Tú me contabas tus desamores, y cuantos desamores me hiciste tú pasar. Pero ahora soy libre de tu amor, de tu querer, ahora soy libre para soñar con quien mi amor lo quiera coger. Yo seguiré acordándome como no de aquellos días con los que contigo soñé, pero ahora ya no sueño contigo y busco con quien mi sueño quiera compartir. Lastima de ese mi primer amor no pudiera hacerlo realidad, pero ahora ya soy libre para poder amar.

3º Reflexión: Un viento más pero nunca un viento cualquiera.

(recomendación: Escuchar Blowin in the wind de Bob Dylan)

Mi pequeño barco que un día te vi zarpar,  te veo como una fragata regresar, sin miedo surcas los mares porque nunca vas a naufragar  y con alegría vuela por los sueños que vas a alcanzar.

 “Lo bonito de ser maestro es que cada alumno es un barco distinto, con distintos rumbos, y que tu eres uno de esos vientos que le ayudaran a llegar a un bonito puerto”

Hoy me he sentido bien, es uno de esos días en los que uno cree que el tiempo no se lo llevará como el viento a las hojas de los arboles que poco a poco han perdido ya.

He visto como alguna de las semillas que uno plantó, han crecido, han florecido, dando unas preciosas flores, flores maravillosas de las que disfrutar. Un sentimiento de paz me ha recorrido cada una de mis células, un sentimiento de bienestar ha circulado por mí, y por un día he sido feliz. Para aquellos lectores que me lean, les quiero explicar que es cuando un constructor de veleros diseña un barco, ayuda a construirlo, y llega el día en que por fin lo pone a navegar, siente una mezcla de sentimientos de tristeza y felicidad. Pero cuando al cabo de los años, cuando  observa y vislumbra en la lejanía unas velas ondular, y reconoce con alegría uno de esos veleros que ayudo un día a navegar, su corazón por fin en paz está.

Pues yo me considero no un constructor de esos veleros, ni mucho menos, pero si uno de esos vientos que han hecho a esos veleros volar de puerto en puerto y que ahora con otros vientos ,muchos mejores, navegan en solitario, pero con firmeza frente a las tempestades que pueda encontrar, por ese mar que es la vida, la cual la surcan con gran majestuosidad.

4º Reflexión:EL ESPEJO

El espejo.
(recomendación musical: Missing You de John Waite con alison Krauss)
http://www.youtube.com/watch?v=zEHfy_UgVEc

Hoy me he mirado en el espejo y no me he reconocido. Una extraña sensación me ha recorrido el cuerpo. El fantasma del pasado me ha invadido, he perdido el camino, pero no sé ni cuando ni donde. El espejo ha reflejado un ser sin ilusión, sin esperanza, sin amor. ¿Dónde esta la alegría con la que viajaba por mi vida, donde están los sueños que perseguía, donde los amores que buscaba con la esperanza de una felicidad que no encontraba? En algún momento la brújula de mi vida se paró, y fui desde ese instante un naufrago que no sabia que había naufragado. La persona del espejo no se quien es, pero no soy yo. Donde se quedó esa feliz infancia, perdida una adolescencia, abandonada una juventud, desaparecidos unos años que hace que en el espejo solo vea la vejez de un desconocido. ¿Dónde me abandoné? ¿En que sitio mi camino se borró?, ¿que viento se llevó mis amistades?, ¿cuando al reloj de mi amor sin cuerda se quedó?.Preguntas a las que sin respuesta dejo, vacía la habitación esta, con ese espejo en el que reflejado veo a esa vieja imagen de alguien a quien no reconozco. Un miedo de súbito me invade, intento respirar pero no siento el aire, intento oír mi corazón pero solo oigo el silencio y como la esa imagen del espejo me mira. Intento cerrar los ojos pero no puedo, hay sigue mirándome, sin moverse, sin parpadear. Me estremezco de miedo, una sensación de frío me invade, pero ¿que me invade? Esto es una locura, yo amaba la vida, amaba los mares y las montañas, soñaba con las estrellas, corría detrás de los vientos del amor, huía de la triste soledad, pero sin embargo aquí estoy, sin poder moverme y viendo a alguien en el espejo, o quizás viéndome a mi. De repente un fuerte dolor me sobreviene, un  terrible frío, empiezo a sudar, todo empieza a moverse, a girar como un tiovivo, y una nausea me hace despertar. Me veo las manos, estoy sentado en el suelo. Me levanto temblado, y levantando la vista con miedo miro al espejo y veo en el a alguien joven, tembloroso, sudoroso, despeinado, con mala cara, doy un grito y de repente me acuerdo, ayer fue sábado,  amores perdidos de bar se desvanecen en la niebla del humo de la soledad.

5º Reflexión: Miedo

MIEDO
(Sugerencia musical: Hoy Tengo Miedo, de Fobia)
Miedo. Esa palabra que en si misma no dice nada, pero que quien lo padece se estremece nada más verla, sentirla les quita la vida. Miedo es lo que tienen nuestro queridos jóvenes cuando van al instituto, miedo es el que tienen nuestros chicos cuando ven a su amor platónico, miedo es el que sienten nuestras chicas cuando se visten para ver a su chico deseado, miedo es el que sienten nuestros jóvenes de ser jóvenes, de no ser ya niños ni tampoco adultos. Miedo irracional, miedo incomprensible, ese malestar que empieza en el estomago, nos lo agarra y aprieta, nos paraliza y nos hace temblar. Pero que serian nuestros jóvenes sin el miedo, que serían nuestros jóvenes sin esa adrenalina que les genera ese estado, que serían nuestras chicas si no tuviesen miedo cuando no saben si le gustaran a su chico, que serían nuestros chicos si no tuviesen miedo a ese primer beso, que serían nuestros queridos jóvenes sin el miedo a no ser queridos. Aquí llegamos quizás a una de las claves del miedo de nuestros jóvenes, miedo a no ser queridos, porque quizás ya no se sienten tan queridos en unas familias que viven a la carrera, o ya no se sienten tan mimados como cuando eran niños, tal vez se sienten perdidos en las familias desestructuras que por desgracia hoy en día tanto abundan, pero por una u otra razón ya no tienen suficiente con ese amor de las familias, y necesitan más, necesitan ser queridos por sus iguales, ser aceptados, ser amados, necesitan ser importantes en su mundo. Esto a muchos de nuestros jóvenes les hace sufrir, les hace sentirse invisibles frente a los demás. Por eso tienen que estar cerca de ellos las familias, deben estar, esa es la clave para cuando ellos las necesiten. Los amigos deben acompañar, los profesores deben saber escuchar, las parejas deben querer y así cada uno de nuestros jóvenes deben crecer, cada uno a su ritmo, cada uno en su camino, cada uno a su aire, pero deben saber convivir y quizás superar ese miedo juvenil, que desaparecerá, pero que dejara paso a nuestros miedos adultos, igual grandes e importantes, pero diferentes en la forma pero quizás no en el fondo, pero eso lo dejo para otra reflexión. No quiero despedirme sin daros una pequeña recomendación “El chocolate de la vida son las ilusiones, buenas en su justa medida, amargas en exceso.

 6º REFLEXIÓN

EL TREN DEL OLVIDO
(sugerencia musical:_Solo _Ayer, de Eros Ramazzoti)
http://www.youtube.com/watch?v=HZYn5X8kQLI 

Cuando el tren de la vida empezó a marchar, pasando alegres las primeras estaciones, mirando los paisajes que dejamos al pasar, dibujando historias con lindos colores que nos recuerda estaciones que has ido abandonando y olvidando, en las que disfrutaste cocinando bellos instantes de una vida con los mejores y más bellos  ingredientes. 

Un tren que pasará al olvido, un tren que quiso ser una bella golondrina, pero que como esta se marchó al final de una primavera y ya nunca regresó. 

Cuando pasamos al olvido, desaparecemos como las dunas del desierto, magnificas bajo el sol, pero que una simple brisa las peina, pero que poco a poco la van moviendo, hasta desaparecer bajo el influjo de la luna llena, y que el alba nos la hace olvidar al ser otra nueva duna quien ha ocupado ese lugar. Así es como uno se siente atrapado en el tren del olvido. Tren que rumbo a su estación avanza implacable adentrándose en la mortecina niebla de ese ingrato destino que es el olvido.

No quise ser ejemplo, ni tampoco un maestro, pero cuando cada vez se ve más cerca el oscuro final, final de una misiva sin destino ni siquiera franqueo, me hubiese gustado que la música de mis pensamientos hubiesen regado los verdes brotes de esas frescas hierbas a las que tantas horas dedique pensando que tal vez alguna se convirtiera en un hermoso árbol  que fuese capaz de seguir elevando alta y clara la música de mis pensamientos, antes de que  el sueño del olvido  se acerque con nostálgico y triste réquiem, ya lo oigo aproximarse. 

Sin decir un adiós sino un que te vaya bonito, llego a mi última estación del triste tren de mi olvido,

olvido sin recor, olvido sin temor, olvido sin amor, olvido sin lágrimas, en una sola palabra OLVIDO