Siempre quise escribir un libro, pero nunca supé de que iba a escribir. Tal vez sea lo que llaman el miedo al folio en blanco, tal vez sea que no tengo nada que contar. En algún sitio he leido que los escritores noveles escriben sobre algo que conocen, algo que les ha ocurrido, yo no voy a ser menos, tengo 17 años y de lo único que puedo escribir es de mi vida. Mi vida es en apariencia tranquila, como la vida de cualquier adolescente de 17 años, aunque yo creo que ya soy una mujer. Eso que llaman adolescencia ya la pasé a mis 13 años, la edad en que me enamoraba del chico más payaso de la clase, la edad en que me enamoraba de los actores de mi serie preferida. Ahora ya no, tengo a mi chico, aunque tengo claro que no es el amor de mi vida, pero claro hay que tener chico si una vive en una ciudad pequeña como la mía. Por cierto soy de, bueno que más da, cualquiera que viva en una ciudad pequeña me entiende, ¿verdad?.
Para empezar a contaros como es mi vida empezaré, por el principio de la semana, el lunes.
El finde ha sido mortal, botellón en el parque, carreras para que no nos pillará la poli, pelea con una pringá del insti, pelea con mi chico por haber quedado con una chica de su clase para hacer un trabajo, enfin un inde de lo más normal.
Y hoy lunes, sonando la mierda del despertador, mientras intento levantarme ya escucho a mi hermano pequeño ducharse, y tan alegre como todos los lunes porque va al colegio, ¡será imbecil mameluco!. Ya aprenderá cuando vaya al insti que eso de levantarse un lunes para escuchar al amargado profe de filosofia como le ha dejado su mujer,es un mierda, que se creerá el cretino,¿ que nos interesa su vida?Bastante mierda tenemos nosotras en las nuestras para encima tener que aguantar sus melancolicas charlas.Continuará.....
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